Transcurrido casi un año y a punto de comenzar una nueva expedición de la Fundación Ilumináfrica al Hospital de San Michel en Dono Manga (República de El Chad) quiero dar cuenta en esta publicación de otras actividades que, aprovechando el viaje, se desarrollan en la zona.
En ese entorno y sin perder de vista mi labor como médico, no puedo dejar de pensar qué se puede hacer para mejorar las condiciones de vida de los que habitan unas tierras tan desfavorecidas.
En el primer viaje, me llamó la atención que los limoneros que había en el recinto del hospital no los habían podado nunca y los frutos eran muy pequeños. En la siguiente expedición llevamos material de poda y enseñé a Frankee, el jardinero, a podar. La mejora fue evidente.
En la expedición del 2021 ratificamos las dificultades de la zona para cultivar tomates y otras hortalizas. Las matas eran pequeñas y los frutos escasos. Al volver trajimos unas muestras de tierra y, examinada por un amigo experto, pudimos comprobar que se trataba de una tierra compuesta en su mayor parte por arena, por lo que no retiene a penas el agua y no contiene alimento para las plantas. Enseñamos al encargado del huerto a compostar con hojas y estiércol de vaca y este años se han podido recolectar tomates como muestra la imagen.